El 24 de marzo, en víspera del Día Internacional del No Nacido, el Icono de Nuestra Señora de Czestochowa se detuvo en la prisión de mujeres “Vanier Center” en Milton, Canadá. El objetivo de la visita era conocer a Mary Wagner, quien ha estado en prisión desde el 15 de agosto del 2012, por persuadir a mujeres a que den a luz a sus propios hijos. Ella ha permanecido 14 meses en prisión antes de que comience su juicio.
Las autoridades de la prisión accedieron a la visita y a que se celebre una misa. El padre Allan Varlaki de la parroquia vecina, Santo Rosario en Milton, nos ayudó trayendo todo lo necesario para la celebración eucarística. La misa fue oficializada por el padre West, Vicepresidente para las Misiones de Vida Humana Internacional. Durante la homilía, habló sobre la misericordia ilimitada de Dios. En la misa estuvieron presentes cerca de 25 prisioneras, guardias, enfermeras, personal administrativo y visitantes. La prisión tiene capacidad para 300 mujeres.
El principal propósito de la visita era hacer posible que Mary Wagner se reuniera con el Icono de Nuestra Señora de Czestochowa en su Peregrinación en Defensa de la Vida. Esta no es la primera prisión que Nuestra Señora visita durante su recorrido. Ella también visitó una prisión de mujeres muy grande cerca de Madrid, en donde una inusual procesión se organizó por los corredores internos de las celdas de la prisión.
No todos los que se encontraban presentes eran católicos, así que algunos no pudieron recibir la sagrada comunión. Sin embargo, todos fueron invitados a pasar al frente para recibir una bendición especial. Los presentes oraron un denario del rosario, del misterio de la Anunciación. Luego de eso, se acercaron para tocar al Icono y hacer una oración individual para que la ley canadiense respete la vida. Al final, John Bulsza, quien contribuyó significativamente en la organización de esta visita, leyó una carta del primer responsable de esta visita, el padre Peter Baltarowicza, párroco de la parroquia Nacimiento de la Santísima Virgen María en Siemylow, Polonia, de la diócesis de Wroclaw. Él escribió:
“La Santísima Madre en su mirada nos abraza a todos: sacerdotes, prisioneras, administrativos y visitantes… ¡pero sobre todo mira a las mujeres presas! Esa es la mirada de amor y de misericordia. La Santa Madre desea decirles, a cada una de ustedes: ‘Tú eres una hija amada de Dios’. (…) yo quisiera, junto a la Santa Madre y a su hijo Jesús, hablar un momento sobre nuestra querida hermana Mary Wagner. ¡Gracias por luchar en defensa de la vida! Este es un inmenso regalo que has donado al mundo (…)
Que este encuentro con la Santísima Madre sea para todas ustedes una bendición. La Santísima Madre conoce sus corazones, conoce sus necesidades. Oren y ella llenará sus corazones con amor.
Gracias a las mujeres, que junto a Mary rezan todos los días.
Besen el Icono de la Santísima Madre.”
Mary estaba muy agradecida por la visita, así como otras prisioneras y visitantes. Esta es la segunda misa en la que Mary participa desde su arresto en agosto del 2012.
Mary Wagner, católica de 38 años, ha defendido valientemente el derecho a la vida de los no nacidos. Durante muchos años, Mary se acercaba de manera pacífica y sin violencia a las mujeres que esperaban ser atendidas en las clínicas abortivas. Usualmente ella regalaba a las mujeres embarazadas una rosa blanca, pidiéndoles que salven a sus hijos y entregando una lista de instituciones en donde podían buscar ayuda. La denuncia dice: “interferencia en la operación legal de un negocio”
Ella ha sido arrestada en seis ocasiones anteriores y ha estado en total 3 años en prisión. A pesar de todo, su actitud no cambia. Mary, en su carta a los polacos escribió: “La visita a Polonia me llevó también a Auschwitz. No hubiera querido ir sola, pero no quería decepcionar a mis amigos. Lo que vi ahí me impresionó hasta los huesos. Esto leí en el libro de visitas: ‘Que esto nunca suceda otra vez’. Pero me he dado cuenta que sigue sucediendo delante de nuestros ojos, pero de una forma diferente. Sucede en Canadá y alrededor del mundo.”
Su situación legal actual se agravó debido a que ella violó una orden que le prohibía acercarse a más de 200 metros de cualquier clínica abortiva en Ontario. Durante la lectura de la sentencia, un juez dijo: “Tú estás equivocada y tu Dios está equivocado”. También le dijo que ella no tenía ningún derecho de exponer a las mujeres a un “estrés adicional”.
Durante la audiencia, que tuvo lugar en diciembre, se reveló que en la clínica abortiva, donde Mary fue arrestada, jóvenes de 14 y 15 años pueden acceder a un aborto legal sin el conocimiento y el consentimiento de sus padres, hecho que está en concordancia con la ley canadiense.
El caso de Mary Wagner está ganando importancia sin precedentes. Está llevando la atención a que un niño concebido es un ser humano. Mary actúa de acuerdo con la Sección 37 del Código Criminal, que permite la autodefensa y demuestra la inconsistencia con el Código Criminal de Canadá y la Constitución. Esto permitirá crear una nueva definición de ser humano en Canadá, que hoy no posee ninguna protección hasta el momento de su nacimiento.
Cartas de solidaridad para Mary Wagner llegan de diferentes partes del mundo. Todos pueden escribirle, en inglés, con atención a Mary Wagner, a la siguiente dirección: Vanier Centre for Women 655 Martin Street, Box 1040, Milton, Ontario L9T 5E6, Canadá.