Nuestra Bendita Madre en su Icono de Czestochowa llegó a Omaha el 9 de abril, y se detuvo en la Iglesia de San Bernardo. Omaha es la ciudad más grande en el estado de Nebraska, en la parte central de Estados Unidos. Localizada en la rivera oeste del río Misisipi, es llamada simbólicamente la Puerta al Oeste.
Solía ser el centro de transporte para los ganaderos del Medio Oeste. Hoy en día tiene cerca de 400 mil residentes. El padre Walter Nolte es el párroco de San Bernardo y se aseguró de que la Virgen recibiera una apropiada bienvenida, además de encontrar un lugar adecuado en el presbiterio dentro de su iglesia para que este rodeada de las oraciones de los fieles.
En la mañana hubo una misa con los niños de la escuela San Bernardo. Asistieron 190 estudiantes con sus profesores. El padre West explicó a los niños el significado de los iconos y les hizo una breve historia sobre el Icono de Nuestra Señora de Czestochowa. Luego de la misa, tanto los profesores como los estudiantes veneraron a la Madonna Negra antes de regresar a sus rutinas.
Dejamos la Iglesia de San Bernardo para ir a una vigilia de dos horas frente al abortorio del infame LeRoy Carhart en Bellevue. Esta era la razón principal de venir hasta Omaha, para rezar por el cierre de esta clínica de abortos y por la conversión de LeRoy Carhart y sus colaboradores.
LeRoy Carhart es un abortista que apoya la matanza de los bebés, incluso durante la labor de parto (aborto por nacimiento parcial). En los Estados Unidos el niño está protegido solo minutos después de haber nacido. Carhart es famoso por haber luchado en la Corte Suprema del Estado defendiendo el aborto durante la labor de parto. Los legisladores de Nebraska negaron ese procedimiento, y luego Carhart apeló a la Corte Suprema contra esa ley. La Corte Suprema del Estado inmediatamente apoyó la ordenanza, pero luego tuvieron que cambiar la sentencia, porque el Congreso de Estados Unidos impuso una prohibición federal sobre el aborto por nacimiento parcial. Carhart ha sido acusado en algunas ocasiones de poner en riesgo la vida y la salud de las mujeres. Él posee algunas “clínicas”. Su abortorio en Bellevue está ubicado en un edificio en ruinas, que a primera vista pareciera que está colapsando. Es sorprendente que las mujeres que vienen hasta aquí a abortar a sus hijos no se den cuenta del lugar.
Nuestra Señora de Czestochowa visitó una abortorio de Carhart en Germantown en Maryland. El Padre West dirigió la vigilia de oración con un grupo pro-vida en la Festividad de Nuestra Señora de Czestochowa el 26 de agosto del año pasado. Al día siguiente, tres niños fueron salvados, ya que tres mujeres cambiaron su forma de pensar y decidieron mantener con vida a sus bebes. Muchas cosas maravillosas pasaron ahí (ver el reporte de Germantown). El padre West dijo que incluso si no se salvaran vidas, todavía valía la pena rezar, porque seríamos como María, San Juan, Santa María Magdalena y los otros fieles discípulos que se mantuvieron al pie de la Cruz. Nosotros siempre debemos de esperar que Nuestra Señora nos ayude.
Como suele suceder en Estados Unidos, al frente de la calle hay un centro pro-vida llamado Essential Pregnancy Service (EPS), que sabe acercarse a las mujeres en crisis de embarazo, para ofrecerles una solución real como es el test del embarazo, ultrasonidos, educación y nutrición y consultoría para las mujeres que incluso pasan por el síndrome del post-aborto. Este lugar ha estado aquí desde 1973, es decir, desde el momento que el aborto fue legal en Estados Unidos y han salvado la vida de miles de niños. Sus oficinas son limpias y acogedoras para los visitantes, al contrario de lo que se ve en el abortorio cruzando la calle. En esta ocasión, el centro ofreció acogida a Nuestra Señora y su séquito.
En el abortorio de LeRoy, la Madonna Negra fue colocada en la mitad del grupo de activistas pro-vida que comenzaron a rezar. Cerca del lugar, tres oficiales de policía observaban toda la actividad. Ellos conversaban con un grupo de cristianos que se habían reunidos a protestar, no contra el aborto sino contra la presencia del Icono de Nuestra Señora de Czestochowa. Ellos decían que el culto a una imagen era una blasfemia contra Dios. Estos cristianos estaban siendo liderados por un ex católico que nos acusaba de ir contra el primer mandamiento que dice: “No te harás imagen” (Éxodo 20, 4). Ya en la antigua iconoclasia bizantina se discutía acerca de las imágenes, y esto costó mucha sangre. Los iconos han subsistido y ahora ayudan a permanecer a las personas en la fe. El padre West hace hincapié en prácticamente todas homilías y presentaciones que los católicos no adoran a las imágenes, sino que adoran a Dios mismo y veneran a su Madre y a los Santos. Un icono es solo un camino al cielo. La veneración pasa del icono a su prototipo, la persona cuya imagen se representa. Antes de la Encarnación de Jesús, Dios no podía ser visto por ojos humanos, por lo tanto, era razonable prohibir la representación de imágenes. Pero Jesús, al aparecerse en cuerpo quería ser visto, por lo que es apropiado y natural para nosotros hacer imagines de Nuestra Señor, como por ejemplo la Santo Sudario de Turín.
Las personas que estaban reunidas para protestar por el culto a Nuestra Señora parecía que no les importaba la matanza de los bebes. Muchos de ellos son ignorantes del significado teológico de los iconos. Permanecían cerca de nosotros con sus pancartas y los pro-vidas rezaban también para que ellos comprendieran estas acciones. Chris se acercó a uno de los manifestantes y trató de conversar con él. No fueron muy amigables pero le permitieron tomar algunas fotos.
Después de pasar una noche en el Benedictine College en Atchison, Kansas, Nuestra Señora regresó a Omaha para la misa de vigilia del Domingo de Ramos en la Iglesia de San Estanislao, en Nebraska. El padre West predicó en esa misa y celebró dos misas más ese domingo.
La homilía fue corta, debido a lo extenso del evangelio que se refería a la Pasión, pero el padre West habló sobre cómo María estaba junto a ellos con el Icono así como Ella estuvo presente junto a la Cruz y que Jesús nos la entregó como Madre. El coro de la parroquia hizo un canto en inglés, una lamentación especial Gorzkie Zale ("Penas amargas") de la Santísima Virgen María en la vigilia del Domingo de Ramos.
En la tarde, el padre West realizó dos presentaciones cerca de las 14h00, y luego de una ceremonia de despedida y procesión hasta el vehículo, Nuestra Señora comenzó su recorrido de vuelta a Toronto, Canadá, donde la esperaba un grupo de polacos en Bramton, cerca de Toronto. La visita ahí fue rápida, desde el Miércoles Santo hasta el Viernes Santo.