El Ministerio de Nuestra Madre Dolorosa es un centro de retiro en Vandalia, Illinois, dentro de la diócesis de Springfield, fundada como Asociación Diocesana Privada de Fieles Cristianos bajo el apoyo del obispo Thomas John Paprocki. Debbie Pryor y Vanessa Keck fundaron el Ministerio de Nuestra Madre Dolorosa como una manera de acercar a otros a la fe católica. Con los años se ha convertido en un ministerio de sanación y reconciliación.
Dondequiera que la Virgen Negra va, ella trae consigo curación y reconciliación, por lo que varios ministerios al servicio de los que sufren de aborto han adoptado a Nuestra Señora de Czestochowa como su patrona. Durante nuestra peregrinación, muchos han notado su expresión aparentemente triste. La verdad es que Nuestra Señora está de luto a causa de los pecados de la humanidad y por la falta de gratitud en los corazones de los hombres por el sacrificio que hizo su Divino Hijo en la Cruz.
El Icono de Peregrino de Nuestra Señora de Czestochowa llegó a Vandalia después de parar en la Iglesia Santa Juana de Chantal, en Chicago, el viernes por la noche. Sor María Paulina deseaba ardientemente llevar a la Virgen Negra al sur de Chicago, después de verla en Naples, en febrero.
Sor María Paulina promueve el Apostolado del Sufrimiento Redentor, que hace hincapié en la santidad y el valor del sufrimiento redentor a través de la oración, la promoción y la educación con un enfoque específico en la enfermedad, la discapacidad física y el cuidado del enfermo al final de la vida. Confinada a una silla de ruedas, debido a su propio sufrimiento de una enfermedad, la hermana tocó el órgano durante la visita de la Virgen y se emocionó mucho cuando acercamos el Icono hasta ella para que pueda venerarlo.
Al igual que muchos de los que asistieron a la conferencia en el Ministerio de Nuestra Madre Dolorosa, nosotros también tuvimos que conducir una larga distancia durante la noche para poder llegar hasta Vandalia, que está a una hora al este de St. Louis, MO. Los conferencista en este fin de semana para la visita de la Virgen, eran el obispo Thomas John Paprocki, el padre West, Sor Mary Claire OLM y Linda Santo.
Durante su hermosa presentación sobre Santa Faustina Kowalska y la Divina Misericordia, Sor Mary Claire contó una historia personal acerca de las dificultades de estar lejos de casa, como ciudadana irlandesa que vive en Estados Unidos. Ella no fue capaz de volver a su Irlanda natal durante años, hasta que el problema se resolvió. Cada vez que hablaba con su anciano padre, él siempre preguntaba "¿Cuándo vienes a casa?". Ella dice que Nuestro Padre Celestial también tiene el mismo anhelo intenso de estar junto a nosotros y siempre está dispuesto a perdonar nuestros pecados. Afortunadamente, su problema se resolvió y tuvo la oportunidad de visitar a su padre antes de su muerte.
Linda Santos habló de su hija Audrey, que murió en 2007 después de 20 años confinada a su cama luego de un accidente en el que Audrey casi se ahoga. Nuestra Señora de Czestochowa se puede identificar con el sufrimiento; en su Icono, a un lado de la cara que tiene cicatrices y la mejilla parece hinchada. Ella es la mejor madre posible, Nuestra Señora apunta a Jesús, que siempre nos da fuerza para soportar los momentos difíciles. Audrey recibió de Linda y de sus familiares la atención amorosa necesaria y todos encontraron fuerza en la oración a través de la invocación de la intercesión amorosa de la Santísima Virgen María.
El padre Peter West dio varias charlas sobre el Icono de Nuestra Señora de Czestochowa y la Peregrinación en Defensa de la Vida de Océano a Océano. Él relató cómo su vocación está muy ligada a la defensa de la vida y a la devoción de la Santísima Virgen María. Una parte importante de su testimonio fue la profundización de la fe después de leer un libro sobre la Virgen de Fátima, y luego su consagración a Jesús por María siguiendo la fórmula de San Luis María de Montfort. Fue después de leer el libro sobre Fátima que el padre West volvió al sacramento de la confesión, siendo todavía muy joven. Una vez que hizo la consagración, primero se involucró en el movimiento provida. Con la Providencia de Dios, su vocación como sacerdote es promover la devoción a la Virgen y la predicación en la defensa de la vida humana.
Estamos agradecidos de que el obispo Paprocki se tomó el tiempo para hablar en la conferencia. Habló de su propia devoción y de la devoción familiar a la Virgen de Czestochowa, además trató sobre la nueva evangelización. Animó a los asistentes a que inviten a otros a las reuniones parroquiales, a orar, a estudiar la fe católica y a realizar buenas obras en el servicio de los demás.
El obispo Paprocki recordó a todos durante su discurso que la relación entre la fe y la cultura es inseparable. La cultura actual no sólo no ayuda a transmitir la fe, sino que es hostil a ella. Recordó que el pueblo polaco es un ejemplo por su capacidad para mantener su cultura y preservar su identidad a pesar de los intentos por suprimirla por sus opresores. En la Tercera Partición de Polonia en 1795, el país fue borrado del mapa mundial después de que fue dividido entre Prusia, el Imperio Ruso y el Imperio austríaco. Las principales razones por las que Polonia ha sido capaz de pasar su cultura de generaciones en generación es debido a su lenguaje y su fe católica. La devoción a Nuestra Señora de Czestochowa es una parte tan importante de la identidad religiosa y nacional polaca como lo es Nuestra Señora de Guadalupe en México.
El obispo Paprocki también habló sobre un interesante fenómeno en su natal Chicago; los hispanos se sienten atraídos a las parroquias que antes eran de mayoría polaca, mientras que los afroamericanos son atraídos a las parroquias que antes eran de mayoría irlandesa. Él cree que la razón de esto podría ser que en las parroquias polacas ya existe la tradición de servicios en varios idiomas. Según su experiencia, los polacos y los hispanos, no ven a Nuestra Señora de Czestochowa y a Nuestra Señora de Guadalupe como rivales. Más bien, está claro que Ella es la misma Señora que se nos presenta en diferentes formas.
Una tendencia interesante en las comunidades polacas es la prevalencia de los centros culturales. Vimos esto en San Eugenio de Mazenod con el Centro del Milenio, que da servicios a la comunidad y evangeliza a través de eventos y el comercio. Gracias a sus actividades diarias inculca la cultura polaca y la fe. Polonia North, es otro centro cultural polaco, fue el patrocinador principal de la visita de la Virgen Negra a Tottenham, Ontario. Orchard Lake Schools en Michigan, que incluye el Seminario de los Santos Cirilo y Metodio, entrena a seminaristas polacos y ayuda a transmitir la fe católica junto con la lengua y la cultura polaca. Polish Youngstown ayudó a llevar el Icono a Youngstown y Cleveland, Ohio. La Madonna Negra también fue honrada con un lugar destacado en el Desfile Pulaski, en la ciudad de Nueva York, que ayuda a promover la cultura y la identidad polaca. El obispo emérito John W. Yanta está planeando la construcción de un centro cultural polaco en Panna Maria, Texas, el primer asentamiento de Polonia en lo que hoy es Estados Unidos.
Aunque la Virgen Negra es venerada en muchas culturas diferentes, la Peregrinación de Océano a Océano en Defensa de la Vida, ayuda a recordar a la gente el vínculo inseparable entre la identidad nacional, la cultura, la fe católica y los valores tradicionales de la familia, como se ve en las comunidades polacas. Por supuesto, estos no son solo valores de Polonia, pero son valores necesarios para la preservación de nuestra sociedad.