El domingo 25 de enero, la iglesia San Juan Pablo II & Santo Tomas Moro, parroquia sede de la custodia en el Distrito Federal, fue nuevamente escenario de una misa en honor a Nuestra Santísima Virgen María en la advocación de Czestochowa.
La santa misa se desarrolló a las 17h00 con la participación de fervorosos feligreses que habían acudido para venerar a la Madre de Dios, a pesar del frío capitalino. Esta parroquia se ha convertido en una especie de sede principal de la Virgen María, desde donde Ella viaja a los distintos destinos mexicanos para peregrinar en su Icono "De Océano a Océano" en defensa de la vida y la familia.
No hay muchos polacos en el área metropolitana de la Ciudad de México. La diócesis tiene sólo dos sacerdotes de origen polaco: padre Krzysztof Jan Meclik Czechowicz, que nació en Czestochowa, y el padre Wieslaw Marek Skowroński, SVD de la ciudad de Chełm cerca de Lublin. El padre Marek Skowronski, conocidos por todos con su nombre en español: el padre Marcos, fue el celebrante de la misa, gracias a una invitación del padre Luis A. Monroy, decano del I Decanato de la VI Vicaría.
El padre Marcos lleva viviendo en México 19 años. Durante mucho tiempo vivió en el estado de Chiapas, estado fronterizo con Guatemala y con profunda riqueza cultural, pero a la vez con un variadísimo contraste social. Hoy en día es párroco de la iglesia del Sagrado Corazón de Copilco el Bajo, al sur de la ciudad de México. El Padre Marcos llegó hasta aquí para celebrar la eucaristía junto a los polacos y rendir homenaje a la más grande de las polacas, Aquella a quien San Juan Pablo II se dedicó totalmente. Totus Tuus.
Representantes de la parroquia sede, así como miembros de Fundación VidaFlorida, dieron la bienvenida a miembros de la comunidad polaco-mexicana. El cónsul de la Embajada de Polonia en México participó de la misa y un matrimonio mexicano-polaco dirigió los cantos.
Nuestra Señora esperaba a todos los participantes en el altar ya decorado e iluminado. Al iniciar la celebración eucarística, el padre Marcos leyó en polaco, la liturgia preparada para la “Peregrinación De Océano a Océano”, invitando a la comunidad a venerar a la Madonna Negra que los había venido a visitar. Luego invitó a José Luis García Chagoyán y a Beatriz González, del Comité Custodio de la Peregrinación en México, a explicar a la comunidad el sentido y objetivos de la peregrinación.
En la homilía, el padre Marcos se empeñó en mostrar a los fieles la importancia de tres imágenes juntas: Nuestra Señora de Czestochowa, San Juan Pablo II y Santo Tomás Moro. Expresó la trascendencia que cada uno tiene para el matrimonio, la vida y la familia; cómo cada uno de los santos patronos, en diferentes épocas de la historia, defendieron heroicamente la causa de la fe.
Se tiene de visita la imagen peregrina de Jesús de la Divina Misericordia del apostolado que encabeza Susana Segura, lo cual ha ido propiciando que la comunidad sede se fortalezca en la comprensión del mensaje de la Divina Misericordia que tanto comprendió el nuevo patrono San Juan Pablo II que se agrega al patronazgo de Santo Tomás Moro. El apostolado de Jesús de la Divina Misericordia fue conducto para que en diciembre del año pasado, un donante anónimo regalara una imagen réplica de la que se venera en la Parroquia de la Madre de Dios de Czestochowa a la parroquia que funge como “campamento base” de la peregrinación en México.