Todos saludaron a la Bendita Madre con la canción polaca “Virgen Negra”, conocida alrededor del mundo y traducida en diferentes idiomas. En esta ocasión se cantó en alemán. Nuestra Bendita Madre, en el Icono de Czestochowa, llegó a la Iglesia de la Inmaculada Concepción en Klagenfurt, en la tarde del sábado 29 de septiembre.
Esta iglesia es muy especial, localizada cerca del monasterio de los Frailes Menores Capuchinos, que han existido por 350 años. Las personas acuden a este lugar por el deseo de sus corazones, ya que el monasterio no está afiliado a ninguna parroquia. Grandes multitudes llegan hasta aquí, incluso de lugares distantes, para la confesión y para participar de la Santa Misa. Hay largas colas para confesarse y se estima que seis mil comuniones se distribuyen anualmente. Muchas de las parroquias en Austria no pueden jactarse de esa cantidad de visitantes. Los padres y hermanos también realizan su ministerio en el hospital local. Cada 13 de mes, la Santa Misa es ofrecida en la defensa de la vida.
La Santa Liturgia fue dirigida por el reverendo Mariusz Polcyn, y la homilía fue dada por el diácono Br. Zbigniew Zaba. Relató acerca de la historia y el significado del Icono de Czestochowa y también dio un testimonio sobre la presencia de Nuestra Señora en su vida y en la vida de su familia. Enfatizó sobre el hecho de que la visita de la Santísima Madre cayera justo en la Festividad de los Arcángeles San Rafael, San Gabriel y San Miguel. Más todavía, que esta visita fuera en sábado, día dedicado a María. En la homilía también comentó que era un día excepcional para él, ya que era su cumpleaños.
Después de algunas horas de veneración, un grupo grande de fieles escoltó en procesión a Nuestra Bendita Madre por las calles del centro de la ciudad hasta la catedral. Un poco de lluvia cayó en la tarde y se dudó en realizar la procesión. Sin embargo, Br. Zbigniew animó a salir a pesar del clima, ya que Nuestra Señora debía ser escoltada. A decir verdad, cuando la procesión salió de la iglesia, la lluvia se detuvo, cosa que dio paso a chistes como que Nuestra Señora quería dar un paseo, después de todo, Ella es la reina aquí.