CANGAS DE ONÍS, camino de Covadonga:
Covadonga dista de Gijón más de 100 kilómetros, y por el camino fuimos en oración. Al llegar a la localidad de Cangas de Onís, (primera capital del reino Astur, en el comienzo de la reconquista de España al Islam), nos encontramos con el otro grupo que venía desde Oviedo;
colocamos los distintivos en todos los vehículos y sacamos una fotografía para recordar nuestra presencia en Cangas de Onís, con el convoy de vehículos delante del campanario de la iglesia. Así emprendimos la subida en peregrinación hasta la Basílica de Covadonga.
COVADONGA
La Basílica de Covadonga fue construida en el siglo XIX en honor a la Virgen en agradecimiento por el amparo recibido de Ella en la primera gran victoria que las huestes cristianas de D. Pelayo obtuvieron sobre las armas musulmanas, en el año 716, la primera batalla de la lucha de reconquista de más de ocho siglos, que concluyó con la reunificación de España bajo la Cruz de Cristo.
Llegados a la explanada de la Basílica del Real Sitio de Covadonga, la procesión de automóviles se dirigió con el Icono hasta la entrada del templo, donde esperaban para dar la Bienvenida a la Virgen de Czestochowa el Abad, miembros del Cabildo y la Escolanía.
Ya dentro de la Basílica (su título completo es Basílica de Nuestra Señora la Real de Covadonga), la imagen de la Virgen de Chestochowa fue colocada en un lugar destacado junto al presbiterio, y se celebró la santa Misa; el Evangelio del día 22 era el pasaje en que María recita el Magnificat, y en la homilía se hizo un llamamiento para la defensa de la vida. Durante la Misa cantó la Escolanía de Covadonga y se contó con la asistencia de más de cien fieles, entre los que se encontraban muchos peregrinos de Covadonga.
Terminada la ceremonia, salimos de la basílica en procesión, presidida por los sacerdotes celebrantes. Se sacaron fotografías de la Virgen rodeada de los muchachos de la escolanía y se acercaron familias para hacer lo mismo. Después de la foto de la Escolanía con el icono se reinició la procesión, alternando todos los que quisieran hacerlo en llevar las andas del Icono camino en dirección a la Santa Cueva. donde se venera la imagen de la Virgen de Covadonga.
En ese mismo lugar, una placa recuerda que, aquí, el 21 de Agosto de 1989, el papa Juan Pablo II había accedido al encuentro con la Santina..
Entre otras palabras dice la placa conmemorativa:
PEREGRINO DE LA FE - S.S.JUAN PABLO II:
"COVADONGA ES UNA DE LAS PRIMERAS PIEDRAS DE UNA EUROPA, CUYAS RAICES CRISTIANAS AHONDAN EN SU HISTORIA Y EN SU CULTURA. EL REINO CRISTIANO NACIO EN ESTAS MONTAÑAS. PUSO EN MOVIMIENTO UNA MANERA DE VIVIR Y EXPRESAR LA EXISTENCIA BAJO LA INSPIRACIÓN DEL EVANGELIO Y DE LA HOMILIA."
Ya dentro de la Cueva Santa, a las 13:30 h., se rezó el Rosario por la Vida y la Familia.
Allí, en la Cueva Santa, permaneció la imagen hasta las 14:15 h., la hora de partida, sin estar en ningún momento sola, custodiada por los devotos de la Virgen. Una oración de despedida del Abad ponía punto final a esta etapa, pero punto y seguido a la peregrinación.
Testimonio:
El sábado 22, inició peregrinación para encontrarse, al pie del monte Auseva, con la Santina. El sol brillaba espléndido asomándose sobre el puente romano de Cangas de Onis para saludar a la señora de Czestochowa antes de subir a Covadonga. Allí en la explanada de la Basílica esperaban el Abad con sus canónigos para darle un respetuoso recibimiento antes de iniciar la Santa Misa. El canto de la escolanía entre órgano y violín nos acercaban más, si cabe, al cielo. Siguieron los villancicos y la esperada procesión hasta la Cueva donde la Reina de nuestras montañas esperaba engalanada de blanco a la Virgen Negra. El silencio y la emoción entre el susurro del agua sólo quebraron por el rezo del Rosario abarrotada la Santa Cueva de Covadonga por un buen número de familias con muchos niños. Se notaba que Ella, la madre de Jesús vela y velará por la familia y por la vida…. Que presente teníamos a nuestro Juan Pablo II cuando con su voz fuerte y sonora hablara con la Santina de Covadonga….