Viernes 28 de diciembre - El traslado se inició temprano; a las 9:00 salíamos de la parroquia en Oleiros, y a las 11:00 ya estábamos en Santiago.
Cuando llegamos nos dirigimos a la iglesia de San Pelayo, o “San Payo” como la conocen en Santiago, que pertenece al Convento de Benedictinas del mismo nombre de Santiago de Compostela.
La comunidad estaba en el coro esperando nuestra llegada, y nada más llegar nos dieron la bienvenida, y la imagen se quedó expuesta en el altar mayor de la iglesia, para que todos pudieran venerarla.
Por la tarde nos hicieron una entrevista para COPE Santiago.
Después, a las 16:00, se rezó un Rosario por la Vida, y el Icono continuó en exposición pública hasta las 21:00.
Durante la noche la Comunidad realizó una Vigilia de Oración por la vida, que resultó muy conmovedora, según dice sor Blanca, la Priora.
La estancia en Santiago fue breve, pero ha llenado de contento a todos los que han pasado por el Monasterio de Benedictinas de San Pelayo. Varios centenares de vecinos se han acercado a venerar la imagen. Ha sido una experiencia magnifica, este Día de los Santos Inocentes, en la ciudad donde está enterrado Santiago Apóstol, patrón de España.
Comenzaron temprano los actos, pues la comunidad que acogía el icono, es una comunidad que sigue la regla de San Benito de Nursia, y su lema es “Ora et Labora”.
Comenzaron los actos públicos, con la oración de Laudes, unida a la celebración de la Santa Misa, (los laudes fueron cantados por la comunidad), y en la homilía de la Santa Misa, el Sacerdote, destacó del evangelio del día - que era la Presentación de Jesús en el Templo - la figura de María, y la relación de ella con la defensa de la vida, y pidió por las madres y por los que se les niega el derecho a nacer.
Terminada la Eucaristía continuó un flujo de fieles que visitaban la imagen, hasta que a las 10:30, se rezó un Rosario, y una Salve, tras los cuales nos dirigimos con la imagen en procesión por la Plaza de la Quintana de Vivos, que está detrás de la catedral de Santiago, hasta la plaza de la Inmaculada, donde esperaba el “Life Mobile”.