LA VIRGEN EN ÁVILA
Avila es una ciudad amurallada, situada al norte de Madrid; aquí nació Santa Teresa de Jesús.
Antes de entrar en la ciudad, en el Santuario de la Virgen de Sonsoles, patrona de Avila, y con más de 5 cm de nieve, nos esperaba Yolanda, una mujer polaca, que nos iba a guiar hasta el destino abulense, la Universidad de la Mistica, un campus Universitario situado fuera de las murallas, cerca del Convento de la Encarnación del que fue priora Santa Teresa. Esta universidad está regida por los Carmelitas Descalzos.
A la llegada, el sonido de la dulzaina y el tambor nos hizo recordar que, a pesar de la nieve que caía, estábamos en España, y el amor a la Virgen se demuestra en todas las circunstancias. Después del cálido recibimiento, uno de los sacerdotes de la universidad, de origen polaco fue el encargado de recibir a la Virgen, y junto a los portadores, la llevaron a la capilla, Durante el tiempo breve que la Virgen permaneció en Ávila fue venerada en la capilla del ICAE, Universidad de la Mística, de los carmelitas. Aquí los actos de oración se sucedieron y se realizó una ofrenda por la vida, en la que tras la petición un niño, se acercaba al Icono y depositaba una vela a sus pies.
LA VIRGEN EN SALAMANCA
Tras la estancia en Ávila, que nos supo a poco, salimos hacia Salamanca, donde nos esperaban en la Capilla de la Vera Cruz. A nuestra llegada a la ciudad esperamos la llegada de los agentes de la policía local que nos proporcionaron escolta hasta la misma iglesia, y que nos facilitaron el acceso por las calles más significativas de Salamanca, que son de acceso sólo peatonal. Pasamos ante la Casa de las Conchas, y bajo la Clerecía, sede de la Universidad Pontificia de Salamanca.
Cuando llegó la imagen a la capilla de la Vera Cruz, la capilla estaba llena y los allí reunidos mostraban gran expectación por ver llegar el Icono de la Virgen, y poder rezar ante él. La oración se prolongó durante toda la tarde, ante el Santísimo y la Imagen de la Virgen. Se sucedieron meditaciones y ratos de oración personal. Después una polaca contó brevemente la historia del Icono de la Virgen y cómo es venerada por los polacos
Tras esto se rezó el Rosario por la Vida, y salimos en procesión hacia la Iglesia de la Virgen del Carmen.
En el camino, la procesión hizo dos paradas: la primera, en el Convento de Santa Úrsula, para que las monjas de este convento pudieran venerar la Sagrada Imagen; y la segunda, ante la Iglesia de los Ortodoxos Rumanos, que está situada en la misma calle, y donde el sacerdote ortodoxo leyó ante el Icono el pasaje del Evangelio de la Visitación y la población ortodoxa pudo rezar ante el Icono. Después seguimos el recorrido de la peregrinación hasta la iglesia de la Virgen del Carmen, donde se celebró la Misa de despedida del Icono.
Eran las 19:00 de la tarde cuando llegó el Life-mobile hasta la puerta de la Iglesia, al tiempo que la imagen salía del templo, con las más de 500 personas que se agolpaban junto al vehículo. Conseguimos por fin salir de Salamanca con las luces encendidas y las banderas desplegadas.
Nuestro próximo destino se presentaba complicado; además, habíamos cometido el error de no colocar en el remolque la placa de matrícula del nuevo vehículo tractor, y el tiempo estaba empeorando. Cada vez nevaba más. Salimos encomendándonos a Nuestra Señora, y pidiéndole que llegáramos bien. A unos 40 kilómetros, sin que aún dejase de nevar, nos paró la guardia civil, y nos llamó la atención sobre el problema de la matrícula, Cambiamos la placa, les dimos a los guardias unas estampas y continuamos el camino por la nieve, que era cada vez más densa. Al llegar al alto del puerto, la nieve ya habla cuajado. Desde aquí iniciamos el descenso hacia Plasencia, y una vez en el valle del Jerte, dejó de nevar.