La parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, en la ciudad de Bielsko-Biala, recibió solemnemente a Nuestra Señora. El altar estaba rodeado de las más inusuales y coloridas flores, y después de la ceremonia de bienvenida los fieles se aproximaron al Icono de forma individual, para ofrecer a María más flores y pedir su intercesión, ya que era la vigilia de Nuestra Señora de Czestochowa, una de las festividades celebrada en Polonia el 26 de agosto.
El pastor Krzysztof Ryszaka, gran organizador, había preparado un excelente programa, en esta, la última parada del Icono en tierra polaca.
El obispo Piotr Gregor, de la diócesis de Bielsko-Zywiec, presidió la celebración de la liturgia y dio la homilía.
La vigilia nocturna duró toda la noche. Se formaron diferentes grupos para orar. Los coros cantaron maravillosamente. Se realizó una misa a media noche, celebrada en honor de María y en memoria del beato Juan Pablo II. A pesar de lo tarde de la noche, la iglesia se seguía llenando. Incluso arribó un grupo grande para la misa de la mañana a las 6h15, para luego despedir a Nuestra Señora a las 8h30, cuando dejaba Polonia para continuar su camino a República Checa.
En la tarde del 25 de agosto, una delegación Checa llegó con Radim Uchac, del movimiento pro-vida "Hunit pro Żivot", de Praga. Junto con los representantes del Movimiento Pro-Vida de Polonia, participaron de la liturgia de la eucaristía y luego se familiarizaron con el manejo del “Móvil Vida”, que debían intercambiar el día domingo.